File:Museo Arqueológico Provincial de Cádiz 29.jpg

Español: Museo Arqueológico Provincial de Cádiz. Quemaperfumes. Pieza de terracota, en forma de prisma triangular, prácticamente piramidal, ligeramente apuntado y hueco. Está modelada a mano, probablemente sobre un armazón triangular (cuyas huellas aún se perciben en el interior). Presenta tres caras planas con los ángulos de unión redondeados. Está rematado por una boca de borde vertical y labio redondeado, presentando seis pequeñas perforaciones de sección circular en la base de dicho borde. Tres pequeñas patas sustentarían la pieza, aunque la fractura que sufrió no permite saber con exactitud como quedarían resueltos estos pies. El interior es muy irregular, de grosores que oscilan entre los 1,7 y los 7,3 cms. Está elaborada con pasta de color ocre amarillento, muy dura y bien cocida.

Las tres caras y los ángulos presentan decoración en relieve, prácticamente de bulto redondo -que no exento- en el caso de las figuras de las esquinas. Éstas representan a tres personajes masculinos, jóvenes, en pie, vestidos únicamente por un faldellín ceñido hasta media pierna, adelantando una de ellas en actitud de avance, apoyadas sobre una peana que sobresale en ángulo recto 7 cms. respecto a la pared del vaso. Uno de los brazos cae a lo largo del cuerpo, pegado a él, mientras el otro se dobla sobre el pecho desnudo. La cabeza está minuciosamente modelada, con el pelo a modo de casquete, y dibujados todos sus rasgos faciales. La actitud y la factura de estas figuras denotan una clara influencia de la estética egipcia. El programa iconográfico se centra en las caras planas de la pieza, siguiendo el mismo patrón en todas y resolviéndolo del mismo modo. Con una distribución simétrica, el conjunto iconográfico está presidido por un motivo en forma de arco, resuelto con líneas en relieve que marcan su silueta, con trazos interiores verticales, con los extremos hacia arriba, enrollados sobre sí mismos. Sobre la parte superior de esta posible representación esquemática del motivo del barco de papiro, vemos dos arcos concéntricos superpuestos de los que parten radialmente hacia arriba siete trazos rectilíneos. Este motivo se ha interpretado como una representación del sol naciente (García Alfonso y otros 1995: 38). Estos motivos descritos, situados en el tercio superior de cada una de las caras, se sostiene sobre una representación de la flor de loto, igualmente dibujados sus perfiles con líneas en relieve, del que a su vez parten sinuosos trazos -representaciones de tallos- que unen la base de la flor con las cabezas de los personajes masculinos representados en las esquinas de la pieza. Entre estas figuras, vuelve a repetirse básicamente el mismo modelo iconográfico, aunque de menor tamaño y en este caso, los tallos -sinuosas líneas- enlazan tres flores de loto: una bajo el motivo central de barco de papiro y sol naciente, y otras dos a los lados.

Iconografía Esquinas que unen las caras laterales: Figura masculina; Caras laterales: centro y mitad inferior: Flor de loto; Caras laterales: mitad superior e inferior, sobre los barcos de papiro: Sol; Caras laterales: mitad superior e inferior: Embarcación; Representación esquematizada de un barco de papiro, resueltos sus perfiles mediante líneas en relieve. El casco del barco es convexo y los extremos se elevan y se enrollan sobre sí mismos. En el espacio interior definido por las líneas de contorno se trazan líneas perpendiculares, verticales, que representarían las cuerdas que atan los haces de papiro que conforman la embarcación [Esta representación tuvo originalmente, en el mundo egipcio y en el fenicio arcaico, un carácter sagrado, escatológico, aunque posteriormente acabó perdiendo su significado entre los semitas adquiriendo un sentido eminentemente decorativo]

Datación 700[ac]=601[ac]

Dimensiones Anchura máxima = 34,40 cm; Anchura mínima = 18 cm; Altura máxima = 65 cm

Figura antropomorfa: Altura máxima = 20,50 cm